El proceso de extrusión-soplado consiste en un procedimiento de soplado en el que en lugar de preforma se utiliza un parisón (una manga tubular) formado por extrusión. Este parisón, normalmente de Polietileno de alta densidad (HDPE), puede ser multicapa (co-extrusión) para dotar al envase de barreras eficaces contra gas y vapor o para incorporar material reciclado, por ejemplo.
El parisón se cierra herméticamente en su parte inferior debido a la acción de pinzamiento que ejerce el molde al cerrarse y retirarse. Posteriormente, el molde pasa a la fase de soplado para luego dejarse enfriar y expulsar la pieza.
Las máquinas de extrusión-soplado pueden contar con 1 o 2 juegos de moldes. Los modelos de 2 juegos de moldes conllevan un mayor rendimiento productivo, ya que mientras se conforma el parisón dentro de uno de los moldes, el otro pasa por la fase de soplado y enfriado.
El envase resultante puede ser translúcido u opaco, y su capacidad es muy flexible, llegándose incluso a fabricar envases de hasta 200 litros. Para envases grandes se recomienda el añadido de sistemas de refrigeración para el aire de soplado, que permiten recortar los tiempos de ciclo (fase de enfriado) y aumentar así la productividad.
PET Packaging Network (PPN) puede proveer esta modalidad de soplado. La tecnología tiene un amplio abanico de aplicaciones y se utiliza tanto en las industrias lácteas y de alimentación/bebidas, como también en la industria cosmética, de aceite mineral, y química, entre otras.